Halloween, la espeluznante Noche de Brujas, está a la vuelta de la esquina. Ya no falta nada para que las brujas, gatos negros y monstruos ocupen las calles. Si bien es cierto que la locura por Halloween aún no es de grandes magnitudes en España, no podemos negar que año tras año más y más gente participa del festejo.
Niños (y adultos) se disfrazan, se organizan fiestas y se piden dulces de Halloween a vecinos, amigos y familiares. ¿Qué os parece si preparamos unos monstruos? Sin duda, una entretenida manualidad de cartón para hacer mientras esperamos que llegue Halloween.
Estos simpáticos monstruos son muy fáciles de hacer… ¡y están monísimos! Son perfectos para decorar una habitación infantil o para ambientar la casa para Halloween si tenemos niños muy pequeños y no queremos que se asusten con las calabazas caladas, las arañas y otros artilugios típicos del festejo.
Para hacer esta manualidad de Halloween sólo necesitaréis un poco de maña y elementos que habitualmente desecháis… ¿Qué pensáis? ¡Diversión, reciclaje y decoración todo en uno!
Materiales necesarios
- 1 caja (de pañuelos de papel o de cualquier otra cosa que tengáis por casa y vayáis a tirar, incluso un saché de leche bien limpio puede servir)
- papel blanco cantidad necesaria
- papel de colores o estampado
- caja de huevos de plástico blanca
- ojos de plástico
- pegamento
Monstruos, paso a paso
Lo primero que debéis hacer es limpiar bien la caja que utilizaréis como cara del monstruo y no olvidéis de cortar un rectángulo en uno de los lados de la caja para crear la boca. El tamaño del rectángulo lo decidís vosotros en base a qué tan grande queráis la boca. Un consejo: cuanto más grande mejor y hacédla siempre con líneas más o menos rectas para facilitar la colocación de los dientes.
Luego, podéis forrarla con un papel que os guste para darle color y hacer más simpático al monstruito. Un truco para que os quede más prolija la boca: pegad el papel con cuidado y dejad uno o dos centímetros en cada lado de la abertura de la boca. Muy despacio, dobláis el papel y lo pegáis por dentro del monstruo. De esta manera la terminación de la boca será perfecta.
En paralelo, debéis dibujar los dientes en un papel blanco y cortadlos. Con la ayuda de una pistola de pegamento (o cualquier otro pegamento que tengáis en casa). pegáis los dientes por la pante interior de la boca del monstruo.
Finalmente, llega el turno de los ojos. Tomad la caja de huevos de plástico blanco y cortad cada espacio de huevo por separado (también podéis utilizar envases de yogur o cualquier otra tacita de plástico que tengáis en casa). Pegad en cada vasito un ojo (¡o varios!) y a su vez, pegad cada ojo saltón en la parte superior de la caja. ¡Y listo! Jugad con vuestra imaginación y cread los >monstruos que más os gusten (o asusten).
Disfrutad en familia de esta divertida manualidad para Halloween, que puede serviros para guardar dentro pequeñas cosas (¡si os animáis a meter la mano dentro de esas terribles bocas!)
Vía: Giggles Galore
los monstruos estan re lindo!! gracias x la idea
Cierto un monstruo de carton