Seguro que habéis oído hablar de las Hama Beads, estas cuentas de plástico que se funden con el calor de la plancha, con las que podemos hacer infinidad de diseños con un efecto parecido al punto cruz. Para ello solo necesitaréis algún patrón de hama beads y las cuentas de colores.
Hoy os enseñaremos a hacer un cuenco ¡de Hama Beads. Con un poco de creatividad podemos superar el clásico formato plano… ¿Queréis saber cómo se hace?
Las Hama Beads y las placas de clavijas se consiguen en cualquier tienda de manualidades, en los chinos, e incluso en Ikea venden un set muy económico. El resto de los materiales los tenéis ya en casa.
Materiales necesarios
- Hama Beads de tres colores
- un cuenco apto para horno (si tenéis dos iguales es lo ideal)
- plancha
- papel de cera
- mantequilla o aceite
- placas de clavijas redonda y cuadrada
Cómo hacer un cuenco de Hama Beads
Haremos un cuenco blanco, con un diseño geométrico como guarda en amarillo y negro. Por lo tanto necesitaremos muchas Hama Beads de color blanco, tenedlo en cuenta antes de poneros a trabajar. Esta manualidad infantil es apta para niños más grandes, ya que requiere una buena motricidad fina. Por supuesto cuando llegue el momento de llevar el cuenco al horno, necesitarán la ayuda de un adulto.
El cuenco apto para horno nos servirá como molde. En mi caso era redondo, por lo que para hacer la base usé la placa de clavijas circular, formando un círculo de Hama Beads blancas más o menos del mismo tamaño que la base del cuenco.
Como os decía los laterales del cuenco tienen una guarda geométrica sencilla, y para hacerla usé la placa de clavijas cuadrada. Yo he elegido el negro y el amarillo, por supuesto que esto es a elección. El diseño debe ser pequeño, y poder separarse en módulos: por ejemplo yo he elegido un diseño triangular, y he hecho cada triángulo que lo forma por separado, para poder luego ir poniéndolos alrededor del cuenco y que se adapten a la forma curva del mismo. Si queréis hacer el mismo diseño que yo, en la imagen podéis ver bien cómo están hechos, con dos filas de cuentas negras y dos filas de amarillas. La cantidad de triángulos que necesitaréis depende del cuenco que uséis como molde.
Una vez que tenemos el fondo y la guarda ya armados sobre las placas de clavijas, pasamos al planchado. Para planchar las Hama Beads debemos usar la temperatura de algodón, cubrir el diseño con el papel de cera para que el plástico no se peque a la plancha, y planchar con movimientos lentos y circulares.
En nuestro caso no debemos planchar demasiado porque las cuentas se terminarán de fundir en el horno, solo necesitamos que se peguen entre ellas para poder armar luego el cuenco. Dejamos enfriar unos minutos si es posible con un peso encima, y ya podemos comenzar a montar el cuenco.
Cogemos el cuenco apto para horno que usaremos como molde y lo enmantecamos o aceitamos para que las Hama Beads no se peguen y además se queden fijadas al cuenco mientras las colocamos. Ponemos la base en su sitio y formamos la guarda como podéis ver en la imagen.
Luego llega la parte más tediosa, para la que hace falta un poquitín de paciencia, pero el resultado final lo vale, ¿verdad? Debemos completar el cuenco con Hama Beads blancas, hasta llegar a la altura deseada. Por supuesto el borde no quedará regular, pero ese es uno de los encantos de este cuenco de Hama Beads.
Cuando hemos completado todo el cuenco como deseamos, lo llevamos al horno precalentado a 150º durante unos 10 minutos, este tiempo dependerá de cada horno, por lo que os aconsejo de controlar continuamente el trabajo. Cuando veis que las cuentas se han fundido al punto deseado, quitáis el cuenco del horno con cuidado de no quemaros y lo dejáis enfriar en el molde, si es posible con otro cuenco igual encima y bastante peso para que quede chato, ya que veréis que en el horno las Hama Beads se inflan un poquillo.
¡Listo! Aunque es un trabajo que requiere paciencia, la técnica es sencilla, y el resultado muy original.
¿Qué os parece?