Aprender matemáticas puede ser un mal trago para muchos niños. Según los estudios, esta asignatura es una de las más suspendidas; a pesar de ser una disciplina imprescindible para nuestro día a día y para el desarrollo cognitivo y personal de cualquier estudiante.
El papel de los padres, en este caso, es muy importante. Si eres de esos a los que le apasionaba las matemáticas en tus años de educación, te dejamos aquí unos cuantos consejos con los que puedes ayudar a tu hijo para que también herede esa pasión. Si, por el contrario, nunca fuiste muy matemático, quizás es mejor buscar clases de matemáticas para pensamiento lógico y que un profesor particular se encargue de ello.
Ideas para que tu hijo aprenda matemáticas
1. FORMA PARTE DE SU APRENDIZAJE
Lo primero y más importante, es que tú estés presente y ayudando a tu hijo para que sepa que puede contar con tu apoyo si lo necesita. Si tiene alguna duda, no le des la respuesta directamente; trata de hacer que encuentre por sí mismo el camino. Las preguntas siempre llevan al razonamiento y al aprendizaje.
De igual manera, juega el papel contrario: pídele que te explique, con sus palabras, algunos de los conceptos que hayáis repasado. Ese “Yo me lo sé, pero no sé explicarlo” no es válido, siempre es importante saber plasmarlo por escrito, con esquemas o dibujos.
2. INTERNET Y LAS APLICACIONES SON SU TERRENO
En internet puedes encontrar multitud de recursos y juegos para que aumente el atractivo de las matemáticas para tu hijo. Ellos están acostumbrados a moverse en este entorno, por lo que les será más fácil adentrarse en la ciencia si lo hacen a través de YouTube, páginas webs u otros recursos.
Las aplicaciones son, sin duda, unas grandes aliadas para ti. Algunas como Geogebra o Desmos (además de muchas otras que encontrarás) son atractivas y muy educativas, por lo que la motivación por aprender matemáticas será mucho mayor que de otras formas.
3. INCLUYE LOS DEPORTES QUE LE INTERESEN
Existen muchísimos tipos de deportes y a tu hijo le gustarán más de dos y más de tres. Aprovecha cuando os sentéis juntos a ver algún partido para afianzar algunos conceptos implicados en las matemáticas: puntuaciones, porcentajes, probabilidad, dimensiones…
Un estímulo que le apasiona, como es el deporte, le ayudará a tener claro que las matemáticas están presentes en todas las áreas de la vida diaria. Las estadísticas son tan importantes en tantos deportes que son una fuente inagotable de entretenimiento mientras se aprende.
4. JUEGA CON LAS MATEMÁTICAS
Los juegos de mesa, por ejemplo, son un buen sitio en el que buscar la diversión y el aprendizaje. Además de pasar un buen rato con tu hijo, empezará a calcular, a desarrollar estrategias y a activar la parte más lógica de su cerebro.
El ajedrez y otros muchos juegos de cartas y de mesa, le ayudará a concentrarse, a buscar soluciones creativas y a resolver los problemas que se le presentan. Esto le ayudará a trabajar las habilidades cognitivas que luego podrá poner en práctica al enfrentarse a las matemáticas.
5. DALE IMPORTANCIA A LA HISTORIA DE LAS MATEMÁTICAS
Conocer el pasado de los números, el descubrimiento de según qué teoremas o las personas que hicieron avanzar esta rama de la ciencia es muy positivo a la hora de aprender. Humaniza las matemáticas, muestra cómo la actividad humana ha evolucionado gracias a los números en actividades como la escritura, la arquitectura, el arte…
Dotar a las matemáticas de una perspectiva histórica nos hace comprender la razón y las motivaciones de algunos acontecimientos históricos. Trabajar con el pasado os ayudará a tu hijo y a ti a acercaros de una forma menos pragmática a las matemáticas.
6. BUSCA LOS NÚMEROS EN LA NATURALEZA
Las matemáticas son naturaleza, y la naturaleza es matemáticas. En el reino animal y vegetal encontrarás muchas referencias a elementos matemáticos como esferas, parábolas, espirales, hélices… Otra maravillosa forma de aprender que las matemáticas son parte intrínseca de la vida.
Invita a tu hijo a dar un paseo por alguna zona ajardinada cerca de casa, o hacer una escapada a alguna ruta de senderismo que no sea demasiado dura. Encontraréis cosas fascinantes ya que, como dijo Galileo Galilei, “La naturaleza está escrita en lenguaje matemático”.
7. LOS ERRORES SON PARTE DEL CAMINO
La forma más habitual de aprender que tiene un ser humano es equivocarse. Equivocarse, reflexionar y ser capaces de ver dónde hemos fallado, para así asimilar de mejor forma los conceptos. Por eso, no penalices los errores de tu hijo; ayúdale a encontrar el fallo y a darse cuenta de cómo debe hacerlo en el futuro.
Como decimos, estos errores son oportunidades excelentes para llegar al fondo de la cuestión y superar el problema al que nos enfrentemos. La repetición excesiva de ejercicios no siempre es la mejor solución, es mucho mejor enfrentar a tu hijo a problemas matemáticos para que también desarrolle la lógica de qué método aplicar en cada caso.
Esperamos que estas ideas puedan ayudarte a ti y a tu hijo a que las matemáticas no se atraganten durante ningún curso, incluso que terminen por apasionarle y dedicarle parte de su vida profesional.