El hecho de que aprender un idioma extrangero como el inglés es una habilidad vital está fuera de toda duda. La mayoría de los padres se dan cuenta de que es importante comenzar a aprender inglés temprano. Una de las mejores formas de aprender este idioma desde pequeños es con profesores particulares de inglés, ya que se adaptan al nivel y ritmo de aprendizaje de cada niño.
Es mejor comenzar a aprender otro idioma a una edad temprana, incluso antes de ir a la escuela. Es mucho mejor empezar a aprender inglés a los 6 años o incluso a los 4 o 5 años.
Los niños bilingües se crían con un desarrollo intelectual y cognitivo centrado en dos idiomas desde el día que nacen. Exponer a un niño a más de un idioma en la primera infancia es muy beneficioso para las mentes jóvenes.
Por lo general, a la edad de 4 años, los niños pueden hablar su idioma nativo bastante bien y su cerebro se está desarrollando activamente y abierto a cosas nuevas. Los niños están interesados en cualquier cosa y están listos para absorber nueva información como una esponja. Baile, música, deportes, ajedrez… ¡el cielo es el límite! Inglés u otro idioma extranjero podría ser parte de esta lista. Existen prerrequisitos psicológicos y fisiológicos para el aprendizaje productivo de un segundo idioma.
Ventajas de aprender inglés a una edad temprana
Los niños que comienzan a aprender un idioma extranjero antes de ir a la escuela, no tienen una barrera idiomática o psicológica. Significa que no tienes que hacer un esfuerzo extra y crear condiciones especiales para que hablen. No tienen miedo de cometer errores porque comienzan a aprender un idioma en un entorno que no evalúa su progreso y el fracaso no tiene consecuencias. Las habilidades de comunicación se benefician de esto, porque primero piensan en lo que quieren decir, y no en cuál es la forma correcta de decirlo.
Aprender un idioma a una edad temprana también desarrolla el pensamiento abstracto, la memoria y la imaginación. ¿ Cuáles son los otros beneficios de aprender inglés a una edad temprana?
Aprender inglés más rápido
Cuando los niños son pequeños, tienen una capacidad excepcional para retener información y sus cerebros están diseñados para asimilar nuevos conocimientos automáticamente. Además, sus procesos de pensamiento son más simples y menos abstractos, lo que les facilita aprender inglés.
Capacidades de aprendizaje mejoradas
Aprender inglés a una edad temprana reduce la presión y el estrés de los compañeros, lo que permite que los niños aprendan más rápido. Participar en actividades que fortalecen su capacidad de aprendizaje y memoria mejora sus habilidades cognitivas, y un mayor nivel de conciencia formado temprano en el proceso de aprendizaje les ayuda a aprender más rápidamente a medida que maduran.
Vocabulario ampliado
El aprendizaje temprano de inglés amplía el vocabulario de un niño, lo que le permite aprender nuevos conceptos y desarrollar su conocimiento. Aprender a hablar, pronunciar y escribir palabras en inglés desde el principio es crucial para este proceso.
Excelencia académica
Los niños que aprenden inglés se vuelven más hábiles en la expresividad, lo que es ventajoso para su éxito académico. El aprendizaje temprano del inglés les brinda las habilidades lingüísticas que necesitan para desempeñarse mejor en las pruebas académicas y sobresalir en sus estudios.
Oportunidades futuras
El inglés es un idioma universal utilizado en muchas industrias, y aprenderlo a una edad temprana abre oportunidades para que los niños exploren el mundo y experimenten otras culturas.
Mayor confianza en sí mismo
El aprendizaje temprano del inglés mejora la confianza en sí mismo y la autoestima de los niños, alentándolos a hacer preguntas y superar su miedo a hablar y escribir en inglés.
Actividad cerebral impulsada
Aprender inglés a una edad temprana mantiene el cerebro activo y saludable, mejorando la memoria, la creatividad y las habilidades cognitivas. Los niños ejercitan activamente su cerebro y su memoria mientras aprenden nuevas palabras y reglas gramaticales, lo que fortalece su capacidad mental.
Fomenta la curiosidad y la motivación de los niños
El dominio del inglés abre un mundo de información, tanto online como fuera de Internet, lo que aumenta la motivación y el interés de los niños en la investigación. Pueden explorar nuevos temas durante horas, ampliando sus horizontes y curiosidad.
El aprendizaje temprano del inglés significa hablar con los niños solo en inglés. A veces puede parecer difícil para los niños y es mejor cambiar al inglés gradualmente. Pero es un error pensar de esa manera. Es mucho más fácil que el cerebro de un niño se acostumbre al hecho de que el maestro solo habla inglés. Se da por sentado y su cerebro rápidamente comienza a aprender. Por esta razón las clases particulares para que los más pequeños aprendan inglés con fluidez es la mejor opción.