La minicuna nos va a resultar muy útil cuando el bebé acaba de nacer, sobretodo por el poco espacio que ocupa, lo que nos permite tenerla ubicada en la habitación de matrimonio sin problemas y evitar ir de un lado para otro durante las tomas nocturnas.
Otra de las ventajas de las minicunas y sus reducidas dimensiones es que el bebé se siente más arropado, por recordarle esta a su estancia en el vientre materno. También nos hace estar más tranquilos cuando el bebé duerme, ya que éste no se puede escurrir dentro de las sábanas, como podría ocurrir en una cuna normal.
El único inconveniente que tienen es que se usa sólo desde el nacimiento hasta los 6 meses, pero si escogemos un modelo plegable o desmontable (como el modelo de cartón de la foto), podremos guardarlo en poco espacio sin que nos moleste.
A la hora de escoger el modelo debemos tener en cuenta ciertas características que garantizarán que nuestro hijo esté cómodo y seguro en ella: los bordes deben ser de 27,5 cm. de alto como mínimo, los laterales acolchados, el fondo plano y rígido, las ruedas deben disponer de bloqueo y la ropa ser desenfundable para poder lavarla.
Os dejo una selección de fotos para que os hagáis una idea de lo que podéis encontrar en modelos de minicunas:
Imágenes: Oclio y Bolin Bolon