¿Qué os parece hacer una divertida manualidad de Halloween junto a los peques? Hoy os enseñamos a hacer una cajita calabaza con una botella.
Sí, como leéis, volvemos a utilizar una botella de plástico para realizar una manualidad fácil y económica para Halloween. Se trata de una cajita o estuche con cierre con forma de calabaza de Halloween, hecha simplemente con una botella y una cremallera. ¡No os perdáis este post!
Materiales necesarios
- 2 botellas de plástico de 500 cc de color naranja
- 1 cremallera naranja del largo de la circunsferencia de la botella
- hilo transparente
- pintura acrílica negra
- tijeras
- cutter
- punzón
- pincel
- aguja
Paso a paso
1- Lo primero que tenemos que hacer es cortar la base de las dos botellas para obtener las dos mitades de la calabaza. La medida es a gusto propio, lo importante es que el corte sea muy prolijo y derecho.
2- Ahora prepararemos una tira de papel con una línea de puntos que nos servirá como guía para hacer los agujeritos por donde pasaremos el hilo para coser el cierre. Los puntos deben tener 1/2 cm. de distancia entre sí.
3- Con la ayuda del punzón y usando la tira de papel como guía, perforaremos a lo largo de todo el borde las dos mitades de botella. Los agujeritos deben quedar a aproximadamente 2 mm. del borde.
4- Llegó el momento de coser la cremallera. Comenzamos desde la parte superior, donde se encuentra el «ganchito» para abrirla, para estar seguros de dejar el espacio necesario entre el borde de la botella y la cremallera en sí misma, de manera que el «ganchito» pueda correr bien para abrir y cerrar la cajita. Simplemente cosemos pasando aguja e hilo por los agujeritos, teniendo cuidado de tensar bien el hilo y la cremallera, para que queden bien cosidos.
5- Cuando terminamos, abrimos la cremallera y cosemos el otro lado a la otra mitad de la botella.
¡La cajita calabaza para Halloween ya está armada! Ahora sólo nos queda pintar los ojos y la boca con la pintura negra. La boca la pintaremos haciéndola coincidir con la cremallera, para que parezca que se abre.
Si queréis, podéis completar la decoración con una cinta verde a modo de hojas, simplemente haciendo un agujero en la parte superior de la cajita y pasando por allí dos trozos de cinta, que anudaréis al interior para que no se salgan.
¿Muy fácil verdad? Es una opción muy económica y original para preparar regalitos para dar a los invitados si hacéis una fiesta infantil de Halloween, y fácilmente podéis adaptar la idea a otro tipo de celebración, sustituyendo la calabaza por una manzana, por ejemplo.
¡Manos a la obra!
